Sí, mama caliente, con relatos de incesto, nos encontramos en el cole con Ernesto y Ricardo. Ambos jóvenes adolescentes con madres muy atractivas. Allí comentan lo que después pasará.
Hablan del pasado como si fuera ayer, ellos tienen ganas de follar y resulta que a cada uno le gusta la madre del otro. Un día se reúnen y hablan ellos, quieren quedar los cuatro, es decir que vengan sus madres pero bien calientes.
Se lo proponen y bingo!, se ven los cuatro follando en casa de Ernesto y su madre. Dos jóvenes, para dos maduras bien ardientes. Lo cierto es que se las follan sin parar, una rubia con el coño grande, la madre de Ernesto, no para de abrirse para su Amigo Ricardo. Ricardo mas gordito, se la folla una y otra vez. La señora rubia no para de gemir ya que hace tiempo que no lo hace. Un poco gordita pero bien putona, se rinde a la juventud del amigo de su hijo Ernesto. Ese día, Ricardo la hizo suya.
Y ahora tenemos a la otra mamá, pelirroja, con cara de putón de escuela a media tarde, y con más ganas de joven que Candy el día de su desflore. Mira a Ernesto como si no hubiera mañana, la mamá de Ricardo ahora le toca follar. En un rato es follada por el jovencito caliente. Al final, como se comprueba, los dos jóvenes logran su objetivo. Follarse a las madres. Dos madres calientes, para dos hijos pervertidos. Aquí abajo una de ellas.