Me sentí sucia y avergonzada después de lo sucedido con el sacerdote. La dómina que llevo resurge a veces. Y esta vez iba a ser la lesbiana interior, la que se pronunciaría.
El diablo conduce un BMW (3)
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El diablo conduce un BMW (3)
Laura había planeado un gran sábado. A pesar que su cuerpo no era para nada voluptuoso, no había nada que un vestido de tubo azul ajustado, con la linea del escote por debajo de las axilas, y unos botines de tacón no pudieran… endurecer. Además, tenia su «rebaño» de follamigos, de manera que siempre pescaba uno que otro cuando así lo deseaba. Era bonita, era fácil y estaba dispuesta…
¿Recuerdas ese día en el que nos encerramos en la habitación? Confesiones como esta me vuelven a mil por hora
Me atrapaste contra la pared… ¿está volviendo a tu cabeza? ¿Te ves mordiéndome la boca, el cuello…? Y entonces me empujas hacia la cama, y me quedo sentada, y tú rodeándome, mi espalda choca con el cabecero. Y me miras, examinando la escena. La camisa blanca que se transparenta te está volviendo loco, la falda, mis piernas…
La mañana se inicia con normalidad. Niños lavándose, vistiéndose, desayunando, preparándose para ir al colegio. Mila y Ana en la cocina. Mila.- Hoy tengo el día completo, una cita a las 12 en un apartotel en la Calle Almagro y esta tarde a las siete tengo otra entrevista en un hotel en la Gran Vía, … Leer más
Mi cabeza. El dolor no me deja abrir los ojos. Clau está conmigo en la cama. Ana y Claudia no están, pero oigo ruido por abajo, estarán trasteando en la cocina. Golpea mi mente el recuerdo borroso de la noche. ¡Joder! ¿Qué he hecho? Ahora puedo entender lo que sentía Lot, después de ser seducido por sus hijas.