8 – La niebla de la guerra.
Me dejó en otro aparcamiento esta casada gorda caliente, los de larga duración como en los aeropuertos. Me explicó cómo funcionaba el robot, tuvo que registrar mi voz, huellas de los diez dedos, con guasa dije que tenía diez dedos más, el descerebrado me miró sorprendido, le faltaba sentido del humor. Pero yo tenía ganas … Leer más