Con mi hermano en su habitación

La otra noche me pasó algo que era la primera vez, tengo 21, llegando a casa después de estar con mis amigas toda la noche, llegué algo caliente y me metí en la cama de mi hermano. Mejor dicho, hemanastro porque es hijo de mi madre con otro padre, negro. Él es negro y hasta este día no supe lo que tenía entre las piernas. Una verga enorme. Y ojalá se pueda publicar en relatos eroticos.

Habíamos estado tomando casi toda la noche, solemos salir de vez en cuando y la verdad es que me pasé con la bebida. No lo suelo hacer pero llegué algo aturdida.

Vivo con mi hermano y mis padres, yo soy Luna, mexicana, normalita, morena, media estatura, aunque dicen que de cara muy mona. Los chicos siempre me rondan para intentar ligar conmigo, algo que no me gusta. Con mi hermanastro siempre me he llevado muy bien y la verdad que la otra noche fue muy distinto.

Pasó todo en la habitación de mi hermano

Cuando llegué pensé en él, no sé por qué, pero lo hise. Así que como estaba algo ebria me quité la ropa y me puse el pijama y me acerqué a su habitación. Perdí el juicio, porque de pensarlo me avergüenzo. Entré para meterme en su cama. Cuando entré él se despertó y me dijo lo que hacía en su habitación. En seguida pudo notar que venía algo tomada pero yo iba a lo mío. Solo una vez le vi el pene negro hace mucho tiempo pero lo quería tener en mis manos. Se lo vi en la bañera, y la verdad que tiene una buena verga. Pero ya ni me acordaba. Así que aunque él no dijo mucho, metí la mano por debajo las mantas y le acaricié su gorda verga negra, todo un pollón. Lo tenía ya medio erecto y colgante, debí impresionarle que estaba excitado. Qué placer fue tocárselo. Se le ponía grande y gorda, tiene verga de buen tamaño, así que continué haciéndolo. Mi hermano ya no me decía nada así que seguí haciéndolo. Es uno de los penes más grandes que he podido tocar, y me toqué al mismo tiempo que le masturbaba. Yo soy algo mayor que él, dos años, así que pude hacer como quise. Le acaricié los huevos, me excitaba el tacto y el morbo y me sentí guarra por hacerlo pero muy a gusto. Le bajé bien los boxers, para tocarle mejor. Le masturbaba y su pene que hasta ahora colgaba, como el de un caballo, ahora se ponía cada vez más grande y gordo. Le acariciaba las ingles, con bastante vello, me excitaba. Y yo me tocaba delante de él, y me saqué las tetas del pijama. Para que me viera hacerlo. Perdí todo el control. Como lo vi muy excitado no quise ponerme arriba porque acabaría muy pronto, pero yo tenía muy mojado el chocho, me hubiera gustado cabalgar encima. Así que lo seguí masturbando con las tetas fuera y él me tocaba. Me puso los pesones muy duros, al ver cómo me acariciaba y verle la verga tan gruesa. Así que en muy poco, se vino encima, me echó leche por los pezones. Lo noté muy espeso y caliente, su verga aún la tenía en mi mano y pude notar cómo lo expulsaba. Hubiera querido ponerme encima pero fue tan rápido que no pudo ser. Pero me encantó, así como el porno casero. Si puedo otro día lo repetiré.

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