Pilar salió de la habitación de su hijo y se fue al cuarto de baño, se miró en el espejo y lo que vio le horrorizó, tenía las tetas llenas del semen de su hijo. ¡Dios mío que he hecho!, Pensó.
Se desnudó y se metió en la ducha, se restregó bien el motivo de sus problemas, las tetas, como si quisiera que desaparecieran.
Cogiendo con mi madre y mi tía.
Capítulo primero. Placentero Tabú El sol del mediodía caía con una intensidad deliciosa, envolviéndome en su cálido abrazo mientras me recostaba en la chaise longue de la terraza. Mis ojos se cerraron lentamente, dejando que el placer de la calidez se filtrara a través de cada uno de los poros de mi piel. Me encontraba … Leer más