Estaba con mi novia solo, ella tiene 18 y es muy caliente. Le dije que no estaban mis padres y que no volverían hasta tarde.
Ella me dijo que tenía ganas de follar, y yo sé que cuando se pone así, hay que follar sí o sí. Es una caliente, y nunca se sacia. Pese a su corta edad, ya le gustan mucho las pollas. Y lo digo en plural, porque no soy la primera picha que prueba. Antes había estado con un amigo, que según ella me cuenta era una pasada follando. La verdad es que no tiene reparos en decírmelo, así que cuando ella me dice que quiere follar, no tengo otro remedio que sacar mi inexperta polla a pasera.
Y lógicamente, una mujer o jovencita como es ella, de mundo, con más pichas probadas que observadas. estoy a prueba cada vez que tengo que metérsela. Ella casi me lo exige, y si no lo hago, sé que no dudaría en dejarme. Tiene miles de tíos detrás de ella.
De aspecto aniñado, poco vello, es una calentorra de cuidado, parece sacada de una peli x de teenegers, jovencita, de coño sonrosado y ni pelos en el sobaco. En cuando me ve la polla ya está buceando, cabeza a bajo y no parar de chupar, la verdad sea dicha, la chupa muy bien. Tiene unos labios carnosos que parece que la esté metiendo en un calentito pastel de chocolate.
Su sensualidad al chupar, y su mojada descomunal hace y provoca que vea en ella la hembra que nunca conocí. Menuda, pero, menuda jovencita que tengo conmigo este verano, que como todo el mundo sabe, este verano, agujero asegurado. Y con ella más.
