Sentada en la puerta de hotel no me atrevía entrar. Había quedado con un chico de color, o sea negro, y estaba nerviosa.
Soy travestí, crossdresser enamorada de los amantes de raza negra y hoy he quedado con uno. Subo finalmente a la habitación, él me espera dentro, la 304 me había dicho por whatsapp, allí estaba.
Entro y ya me doy cuenta de que está completamente desnudo y casi erecto. Se le aprecia buen aparato y enseguida me calienta. Me hace desnudar, me manda y ordena. Yo hago y obedezco. Antes de darme cuenta ya estoy agachada y comiendo esa polla considerable.
Ni me cabe en la boca pero yo sigo.
No logro la ereccion pero estoy muy cachonda, así que él de forma enérgica me da unos azotes en las nalgas y me hace poner a cuatro patas. Me mete su polla y penetra que aún recuerdo sus embestidas duras y ásperas, sin remordimiento a ocasionarme daño. Volvimos a quedar.