Pensativa y apoyada en la pared

Estaba pensativa en la pared, apoyada y sin motivo. Nadie me podía consolar, solo una imagen me venía al recuerdo y era su presencia. La presencia de él que nunca la pude tener más, con la que siempre soñé y la que siempre deseé. Ahora ya no le puedo decir nada.

Morena tetona española