El Hermano Soldado – Cuentos Cachondos

Todo es alegría cuando un hijo de familia llega a casa después de dos años de servicio en el campo de batalla; pero al convivir diariamente, se dan cuenta de que ya no es el mismo.Mike y Jhon se conocieron en el entrenamiento, antes de que los enviaran al frente, a servir en la guerra contra Irak.
Dos años pasaron para que ambos amigos regresaran a sus hogares en los Estados Unidos; primero fueron a la casa de Mike, pues Jhon y él se hicieron tan buenos amigos, que quisieron conocer a sus respectivas familias.
Llegaron a la casa de Mike, en un barrio Latino donde los niños la verlo en la calle le gritaron: â??Ese Miguel, ¿cuantos mataste?â?, a lo que el solo les respondía con una sonrisa. Jhon, rubio, alto y fornido estaba maravillado con la calurosa recepción que la familia le dio a Mike; Su madre, una Señora bajita y gordita abrazó efusivamente a Mike mientras lloraba y lo besaba por todos lados, el Papá, un Señor ya grande, de piel oscura y curtida por el sol, le dio la mano con fuerza y luego lo abrazó diciéndole: â??¡Miâ??jo, que bueno que regresaste, ya nos tenías preocupados!â? y al final Celia, la hermana menor de Mike; a sus 16 años era una morenita preciosa de ojos negros y grandes, pechos redondos y caderas anchas y breve cintura, a quien Mike abrazó mientras decía: â??¡hermanita, que grande estás, mira como has crecido!â?. Luego, todos saludaron a Jhon de mano y él quedó prendado de la belleza latina de Celia que no perdió oportunidad de coquetear con el â??GíŒero â?? como ella lo llamó.
Hubo una gran fiesta en honor de Mike, o Miguel que es el mismo; corrió la comida y la bebida en grandes cantidades, hubo baile, Mike presumió sus medallas ganadas en la guerra y todo terminó hasta entrada la madrugada.
Al final ya solo estaban Celia, Mike y Jhon platicando en el patio de la casa; los Papás de ellos ya estaban muy dormidos, el Señor terminó completamente borracho y la Señora lo llevó a dormir y ella también cayó rendida.
Celia empezó a quedarse dormida y al final se despidió de los chicos y se fue a descansar. Ambos muchachos la siguieron con mirada morbosa; Mike volteó a ver a Jhon y le dijo: â??¡Te gusta mi hermana, ¿verdad cabrón?!â?; Jhon se quedó quieto y solo atinó a sonreír; Mike le dijo: â??no te preocupes brother, a mi también me gusta y quiero proponerte algoâ?; Jhon escuchó la propuesta de Mike sin decir nada, pero un poco asombrado de que un amigo suyo quisiera tener algo con su propia hermana, pero habían sido compañeros de correrías en Irak y lo que estaban por hacer lo hicieron varias veces allá, así que al final, al calor de las copas quedaron de acuerdo, se dirigieron a la recámara de Celia; entraron fácilmente, pues ella nunca ponía el cerrojo; Celia estaba dormida, sin sábanas por el tremendo calor que hacía, pro lo mismo, ella se había acostado solo con sus calzoncitos blancos y nada más. Mike y Jhon sacaron sus lentes de visión nocturna y ambos chicos quedaron maravillados con el hermosos cuerpo moreno de Celia; sus tetas coronadas por dos grandes y oscuros pezones eran un llamado al sexo, y que decir de su conchita que se transparentaba por debajo de sus calzoncitos, ambos chicos se desnudaron rápidamente, pero en silencio, sabían hacerlo gracias al entrenamiento recibido; ambos eran altos y fuertes y sus penes erectos semejaban dos tremendos mástiles de algún barco de guerra; con una coordinación perfecta, se abalanzaron sobre Celia; como habían acordado, Jhon le sujetó las manos y comenzó a atárselas a un barrote de la cabecera de la cama, mientras Mike con una mano le tapó la boca y con la otra la hizo sentir el filo de su cuchillo en la garganta; Celia tuvo un amargo despertar, apenas alcanzó a escuchar a su hermano que le decía: â??¡Estate quietecita y no grites porque si no obedeces te mato!â?.
Celia espantada, abría sus ojazos para ver que sucedía, pero ella no tenía el entrenamiento de los chicos para ver en la oscuridad; quiso moverse, pero ya Jhon la había dejado bien sujeta a la cabecera; Mike le dio un golpe en el estómago que le sacó el aire y Celia comprendió que tendría que estar quieta o serían capaces de matarla; ya había reconocido la voz de Miguel y llegó a pensar que se trataba de una broma, como cuando eran niños, pero al sentir el golpe se dio cuenta de que no era así.
Jhon le arrancó el calzoncito dejándola completamente desnuda, los dos chicos sudaban copiosamente, excitados por lo que vendría a continuación. Jhon se colocó en posición; hizo a Celia abrir las piernas y sin darle tiempo a nada, la penetró salvajemente; Celia soltó un grito que fue callado de inmediato por otro golpe de Mike en el estómago; Celia se tuvo que morder los labios para no volver a gritar mientras Mike vigilaba que nadie hubiera escuchado el grito, pero sus Papás tenían el sueño muy profundo y no hubo ningún movimiento en la casa. Jhon reanudó su penetración y empezó a entrar y salir de Celia con fuerza, gozando con su sufrimiento, pues así había sido en Irak.
Jhon desgarró el himen de Celia y la sangre comenzó a correr; Celia no podía creer que esa fuera la manera de perder su virginidad, ella siempre había soñado con entregarse a un hombre que la amara, de hecho, Jhon le había gustado bastante, pero ahora se arrepentía de haberle coqueteado, pues el mismo Jhon mientras la violaba no dejaba de repetirâ?: ¡esto te pasa por coqueta y fácil, pequeña puta, goza mi garrote que me lo pedías en la cena!â?.
Mike se masturbaba mientras veía lo que Jhon le hacía a su hermana con la tenue luz que entró por la cortina que él mismo abrió un poco; luego se arrodilló en la cama a un lado de Celia y tomándola del cabello le ordenó chuparle el pito; Celia tuvo que mamárselo a su propio hermano, sintió asco, pero se aguantó por miedo a ser asesinada por su propio hermano que ella tanto quería (hasta ese día).
Jhon, sudoroso y jadeante, terminó llenando de leche la conchita de Celia, que desesperada no pudo gritar por tener el tremendo garrote de su hermano en la boca.
En cuanto Jhon terminó, Mike sacó su verga de la boca de Celia y tomó el lugar de su amigo, de igual manera, penetró total y salvajemente a Celia sin darle tiempo de descansar; ella sintió dolor, pero un poco menos gracias a la leche que Jhon le dejó adentro.
Mike empezó a bombear a su hermana mientras Jhon la hizo limpiarle la verga con la lengua. Mike se inclinó sobre Celia y comenzó a morderle los pezones; a ella le fue imposible gritar con la verga del GíŒero adentro, así que solo pudo crispar los puños atados a su cama.
Mike siguió bombeándola y de repente se detuvo, sacó su verga y le dijo a Jhon: â??Ayúdame a alzarla y sostenla asíâ?; Jhon la tomó de la espalda y Mike de las nalgas; cuando la tuvo a modo, le separó las nalgas e intentó metérsela por el culo, pero estaba demasiado apretado, así que Mike insertó un dedo en el culo de Celia y empezó amoverlo adentro, mientras le decía que se lo iba a agrandar para que cupiera su verga. Celia no aguantaba el dolor, pero sabía que no podía gritar o sería castigada; Mike se dio cuenta de que Celia no aguantaría más sin gritar, así que le pidió a Jhon que le tapara la boca, éste último tomó los calzoncitos de Celia y se los metió en la boca, impidiéndole hacer cualquier ruido.
Cuando Mike sintió que el culo de su hermana estaba listo, intentó de nuevo la penetración, esta vez con éxito; despacio, fue empalando a Celia mientras ella intentaba gritar infructuosamente; solo se oían gemidos: â??¡Mmmm nnnn mmmm!â?; Jhon no perdió el tiempo y lamió y mordisqueó los pechos de Celia haciéndola llorar; Mike dijo: â??¡Esta es igual de puta que las que nos cogimos en Irak, brother!â?.
El culo de Celia empezó a sangrar, lo que permitió que la verga de Mike entrara y saliera con más facilidad; él estaba extasiado con el culo de su hermana, estaba tan apretado que no tardó en venirse y llenó de leche las entrañas de Celia.
Jhon y Mike la dejaron caer sobre la cama; Mike empezó a desatarla y Celia creyó que todo había terminado, pero entre los dos chicos la voltearon boca abajo, la atravesaron en la cama de tal manera que sus piernas daban a un lado de la misma y su cara hacia el otro; Mike le entregó a Jhon los brazos de Celia y éste último procedió a atárselos atravesados uno sobre el otro; Celia quiso preguntar que le iban a hacer, pero el calzón en su boca lo impidió, aunque no tardó en darse cuenta lo que iba a suceder a continuación.
Jhon la jaló hasta la orilla de la cama, haciendo que sus rodillas tocaran el suelo; se colocó de tal manera que su verga quedó en la entrada del culo de Celia; con ambas manos le abrió las nalgas y comenzó a penetrarla despacio; el culo de ella ya un poco más abierto gracias a Mike recibió el tremendo garrote de Jhon, no sin dolor, pues la verga del GíŒero era más ancha y larga que la de Mike.
Jhon empezó a bombear el culo de Celia que suplicaba que la dejaran, pero sin éxito. Mike se subió a la cama y se hincó delante de su hermana; la tomó del cabello y la hizo levantar la cara, con la mano libre le sacó el calzón de la boca y puso su verga flácida adelante; Celia entendió y empezó a mamarle la verga nuevamente. Los dos chicos estuvieron gozando de Celia, uno por la boca y el otro por el culo, hasta que Jhon se vino descargando todo el semen en las entrañas de ella.
Una vez que Mike tuvo la verga levantada, se fue hacia atrás de su hermana y sin advertencia la penetró por la conchita, tan fuerte que Celia no pudo evitar un fuerte grito de dolor; Mike se vino casi al instante y estaba a punto de golpear a Celia por haber gritado cuando se escucharon pasos y gritos afuera del cuarto de Celia; sin perder tiempo, Jhon y Mike desataron a Celia, todavía Mike alcanzó a decirle que si decía algo nadie le creería porque ellos eran héroes de guerra y ella no era nada.
Los chicos tomaron su ropa y saltaron por la ventana desnudos, dieron la vuelta a la casa y llegaron vestidos y como si nada hubiera pasado al cuarto de Celia, su Papá estaba sentado junto a ella, que se encontraba cubierta por una sábana, el señor le acariciaba el cabello y le decía: â??¡ya hijita, ya, solo fue un sueño, no te espantes!â?. Su Mamá estaba en la puerta del cuarto y ellos le preguntaron que sucedía, la señora les dijo que Celia había tenido una pesadilla, que continuamente pasaba eso y se despertaba gritando y llorando y que solo se calmaba con un té que ya estaban por darle y fue a la cocina por el té.
Mike y Jhon se quedaron viendo a Celia, ella levantó la cara y Mike le hizo señas de que guardara silencio; con los ojos llorosos, Celia comprendió y bajó de nuevo la cabeza, dijo: â??Por favor no me vean asíâ?; Mike y Jhon se hicieron los comprensivos y se retiraron, seguros de que Celia nunca los delataría.
Continuará…
Segunda parte
Jhon se fue al otro día, agradecido con toda la familia y en especial con Mike y Celia. Dijo que regresaría pronto de visita.
Pero Mike estaba muy hambriento de sexo y no estaba dispuesto a dejar a Celia en paz, así que solo esperaba una oportunidad para volver a complacerse con ella.
Y esa oportunidad se le presentó una ocasión que sus padres fueron muy temprano de compras a una localidad que estaba un poco lejana. Al salir le dijeron a Mike que no hiciera ruido porque su hermana aún se encontraba dormida.
Mike no desperdició la oportunidad, en cuanto vio alejarse el auto de sus padres, se desvistió y se introdujo en la recámara de Celia. Ella dormía boca abajo plácidamente y Mike aprovechó para atarle las manos a la cabecera de la cama; lo hizo con sumo cuidado para que no despertara, su entrenamiento le ayudaba a actuar con sigilo. A continuación, amordazó a su hermana con unos trapos; esto hizo que Celia despertara, pero fue demasiado tarde; despertó en plena oscuridad y quiso moverse, pero estaba boca abajo inmovilizada; intentó gritar, pero tampoco pudo; no veía nada, solo sintió como alguien detrás de ella introducía un dedo en su ano y empezaba a moverlo dentro del mismo. Celia gimió del dolor, pero el dedo era implacable; entraba y salía de su ano y se movía como queriendo ensancharlo.
Luego sintió como el dedo salía de su ano, pero un momento después algo más grande y grueso empezaba a introducirse en el mismo; Mike empujó para insertar lentamente su miembro en el ano de su hermana, que se retorcía del dolor y gemía pidiendo que la dejara en paz: â??¡mmmffff nnnfgfff mmmm nnnn mmmfff ¡â?
Mike la penetró totalmente y luego empezó a bombear sin compasión, gozando con el dolor que le infringía a su propia hermana; Celia creyó desmayar, pero no fue tanta su suerte. Solos e escuchaban los gemidos de placer de Mike y los quejidos ahogados de Celia.
De repente Mike se detuvo y sacó su verga del ano de Celia; ella creyó que él había terminado, pero por el contrario, Mike se había salido y con dos dedos se presionaba atrás del escroto para evitar la venida y continuar con la verga parada.
Cuando se sintió listo, Mike volvió a la carga, el ano de Celia había quedado ya un poco abierto, pero eso no impidió que la chica sintiera un gran dolor al ser penetrada de nuevo por Mike, que esta vez empujó con más furia.
Mike repitió la operación tres veces, cuando sentía que se iba a venir, se salía del ano de Celia, se recuperaba y volvía a penetrarla; ella sentía que se iba a volver loca de tanto dolor, creyó que no soportaría más; pero al final Mike terminó descargando grandes chorros de semen dentro de ella; fue tanto el placer del muchacho que fueron casi tres minutos de descargas lo que soltó dentro de su hermana. Celia sentía que le inundaban las entrañas con tanto líquido y creyó que se cagaría en ese instante, pero nada pasó.
Mike sacó su verga chorreante del ano de Celia, la desató y salió en silencio; en ningún momento dijo algo, ni una palabra salió de su boca y se fue sin importarle el dolor y el llanto de su hermana.
Celia se quedó llorando en su cuarto un rato sin dar crédito a lo que había sucedido. Por un momento pensó contárselo a su Padres, pero recordó lo que Mike la había dicho y llegó a la conclusión de que nadie le creería, así que decidió no hacer nada y aguantarse; haciéndose a la idea de que no volvería a ocurrir.
Un rato después, adolorida y todo, Celia se levantó y salió de su recámara, encontró a Mike viendo la televisión y el le dijo que preparara el desayuno porque sus papás no estaban; ella estuvo a punto de protestar, pero no se atrevió a decir nada.
Celia hizo el desayuno y le sirvió a Mike, luego se metió a bañar. Se acababa de enjabonar el cabello cuando escuchó que alguien intentaba abrir la puerta del baño; gritó que se encontraba ocupado, pero escuchó como alguien abría la puerta; abrió los ojos, pero el shampoo se le metió y tuvo que cerrarlos de nuevo; la cortina del baño fue corrida y Celia sin tiempo a nada sintió como la jalaban del cabello, tirándola al piso.
Unos momentos antes, Jhon había llegado a la casa de Mike y lo encontró desayunando, lo saludó y de inmediato le preguntó por Celia; Mike le dijo que se estaba bañando. Jhon dibujó en su rostro una sonrisa diabólica y le dijo a Mike que entraría a verla. Mike le dijo que estaba bien y siguió desayunando sin inmutarse.
Jhon abrió con facilidad la puerta del baño y sin hacer caso de los gritos de Celia, entró y la derribó desnuda, aprovechando que ella no veía y antes de que la chica pudiera hacer nada, Jhon se subió en ella, y con una rodilla la forzó a abrir las piernas; Celia gritó y trató de defenderse, pero Jhon le dio un golpe en el estómago, luego la tomó de los brazos y le dijo que se callara o la mataría. Celia entendió que el tipo hablaba en serio, se calló pero empezó a sollozar. El dolor de saber lo que a continuación iba a suceder, aunado al ardor que le provocaba el shampoo que quedó en sus ojos la hicieron llorar.
Jhon no esperó más, después de dos intentos fallidos, metió de golpe su miembro hasta el fondo de la vagina de Celia; ella aulló de dolor y él empezó a bombear sin compasión, haciendo caso omiso del sufrimiento de su victima.
Jhon chupó, lamió y mordió los pechos de Celia mientras seguía entrando y saliendo de ella sin soltarle las manos; ella se retorcía de dolor pero nada pudo hacer contra la fuerza bruta del soldado; poco tiempo después, Jhon se vino soltando grandes chorros de semen dentro de Celia que cada vez se sentía más humillada por la situación.
De repente se escuchó la voz de Mike que decía: â??¡Pero que estás haciendo imbécil!â?; Celia y Jhon volteó, pero ella solo alcanzó a ver la borrosa figura de su hermano; supuso que venía a lavar la afrenta que su amigo había realizado, pero Mike lo único que hizo fue regañar a Jhon por haber dejado la puerta del baño abierta mientras violó a su hermana; â??¿no ves que la pueden oir?â?, le reclamó.
Jhon se levantó mientras Mike cerró la puerta; este último le dijo que le sostuviera las manos a Celia sin dejarla levantar; entonces Mike tomó el lugar de Jhon y de igual manera, sin ningún preámbulo, clavó su verga en la panocha adolorida de su hermana. Celia le suplicó que no lo hiciera más, que por favor ya la dejaran en paz; pero Mike y Jhon reían como tontos sin hacer caso de sus súplicas.
Mike se recostó sobre Celia aplastándola con su cuerpo y siguió bombeando al tiempo que le tapó la boca y le mordió el seno que Jhon no había mordido. Celia desesperada trataba de soltarse y sacarse la verga de su hermano, lo que él interpretó como movimientos de gozo, le dijo que era una puta por gozar con lo que le estaban haciendo.
Un poco después, tiempo que a Celia le pareció una eternidad, Mike soltó sus chorros de leche en su hermana, al mismo tiempo, le apretó un seno y le mordió con fuerza el otro. Celia gritó, pero sus gritos fueron apagados en la mano de su hermano.
Mike se levantó y le dijo a su hermana que acabara de bañarse y saliera a atender a Jhon. Ellos salieron del baño, dejándola tirada en el piso y llorando en silencio.
Continuará…
Tercera parte.
Celia empezó a odiar profundamente a su hermano Mike; pero él no se dio por enterado; un tiempo la dejaron tranquila, pero luego siguió abusando de ella junto con su amigo Jhon.
La ultima ocasión fue un día que Celia estaba haciendo la limpieza de la casa; sabiendo lo morboso que eran su hermano y su amigo, decidió ponerse ropa muy holgada para no llamarles la atención.
Mike y Jhon estaban en la sala de la casa tomando cerveza y viendo TV; el Papá de Celia no estaba y su Mamá estaba en la cocina.
Cuando Jhon vio a Celia pasando la aspiradora, le dijo algo al oído a Mike y este se levanto y fue a la cocina, le dijo a su Mamá que la llevaría a comprar algunas cosas y en poco tiempo los dos salían a la calle, dejando a Celia y a Jhon solos en la casa; ella no se dio cuenta, pues con el ruido de la aspiradora no escuchó cuando salieron.
Cuando Jhon vio que se alejaban en la camioneta de Mike, puso manos a la obra; aprovechando que Celia estaba agachada, Jhon la abrazó desde atrás, aprisionando sus brazos e impidiéndole moverse; cuando Celia reaccionó fue muy tarde, pues aprovechando el factor sorpresa, ya Jhon empezaba a desvestirla; Celia le gritó a su Mamá pidiéndole ayuda, pero nadie respondió; Jhon le tapó la boca con la mano libre y de un rápido movimiento la tiró al piso, quedando encima de ella; rápidamente le rompió la blusa y con una tira de la misma le ató las manos atrás y con otra la amordazó. Celia se retorcía desesperada, tratando de impedir lo que Jhon le quería hacer de nuevo; no estaba dispuesta a dejar que la siguieran humillando.
Pero Jhon ya tenía el control total de la situación; teniendo a Celia tirada boca abajo en el piso sin blusa, procedió a quitarle el pantalón mientras le decía: â??Estate quieta o te va a ir peor; ya tu hermano me hizo favor de llevarse a tu madre para que no molestara mientras lo hacemos; te lo voy a hacer toda la tarde y no lo vas a poder evitar, así que mejor te calmas si no quieres que te golpee!â?.
Celia creyó que se volvería loca por tener que soportar tanta humillación mientras Jhon terminaba de desnudarla por completo. Jhon la hizo voltearse boca arriba y ella vio la mirada morbosa y de locura con que él miraba todo su cuerpo mientras se desnudaba y supo que estaba en manos de un loco; sintió miedo de lo que le pudiera hacer y empezó a pensar como podría escapar de esa situación.
Pero mientras ella pensaba, ya Jhon tomaba acción, se hincó e hizo que Celia abriera las piernas, se colocó en medio de ellas y como siempre, sin ningún aviso, metió su miembro de un empujón hasta el fondo de la panocha de ella. Celia volvió a sentir el intenso dolor que últimamente se estaba volviendo costumbre, se retorció tratando de sacar el pene que le quemaba por dentro. Jhon disfrutó más de la violación al verla retorcerse, pues esto le proporcionó más placer.
Jhon empezó a bombear con fuerza, gozando con cada embestida y sonriendo como loco; luego, de repente, sacó su verga de Celia y la obligó a voltearse boca abajo, Celia, desesperada, gritaba por debajo de la mordaza y soltó un alarido cuando Jhon metió su verga en su ano; él metió su verga despacio hasta el fondo; Celia sentía como que la partían en dos y empezó a llorar.
De repente la puerta se abrió y entró Mike; Jhon se incorporó rápidamente, pero Mike le dijo que continuara porque había dejado a su Mamá con una tía y regresaría por ella en la tarde.
Detrás de Mike entró otro chico latino aún más alto que Jhon y bastante musculoso; sin inmutarse, vio lo que Jhon le hacía a Celia y ambos, Mike y Sam, como llamaban al chco latino, empezaron a desvestirse mientras Jhon volvía a clavarle la verga a Celia en el ano.Sam le dijo a Mike: â??¡Eh, si que está buena la puta esta ¿eh?!, me hubieras invitado antes brotherâ?. Mike solo sonrió y le dijo que se preparara, pero ya la verga de Sam se levantaba en toda su extensión, era un vergón tremendo, de dimensiones descomunales, medía más de 27 cm y tenia un ancho de 2.5 pulgadas mas o menos. Celia alcanzó a ver el tremendo falo del tipo y creyó morirse, imaginó que ese miembro le dolería mucho más que los de su hermano y Jhon.
Mike y Sam esperaron desnudos hasta que Jhon terminó con Celia y luego se aproximaron a ella, entre los dos la levantaron del piso y la subieron a una silla de lado, quedando sus piernas a un lado de la silla y su tronco y cabeza hacia el otro; Sam estaba del lado de sus piernas y Mike del otro; el primero le abrió las piernas mientras Mike le quitaba la mordaza; Sam se colocó en posición y clavó su verga de golpe en la panocha de Celia; ella abrió la boca para gritar y eso fue lo que aprovechó Mike para meter su verga en la boca de ella; la tomó del cabello y la obligó a mamarle la verga; Celia no se preocupó mucho por mamársela a su hermano porque el dolor que le provocaba el tremendo falo de Sam no la dejaba pensar en otra cosa, creyó que la atravesaría de lado a lado, en eso, Sam dijo: â??Solo entró la mitad, ahí te va lo demás mamacitaâ? y empujó aún más su vergón en la pobre chica.
Celia gritaba y suplicaba, pero todo era callado por la verga de su hermano en su boca; Sam logró meter casi dos terceras partes de su verga, pero ya no entró más, así que empezó a bombear y cada empujón era un suplicio para Celia que sentía que la partían por la mitad, pues Sam empujaba hasta el fondo.
Celia lloraba con los ojos desorbitados mientras Sam y Mike gozaban penetrándola por arriba y abajo; unos instantes después, Mike terminó e hizo que Celia se tragara el semen que a chorros le soltaba; Celia lo tragó con mucho asco y deseando que Sam terminara pronto también.
Pero al parecer Sam tenía mucha energía, porque seguía bombeando a Celia con fuerza; siguió y siguió; Celia tenía la verga de Jhon en la boca, por lo que no pudo gritar, pero se quejaba. Jhon terminó en la boca de Celia, pero Sam siguió todavía durante unos veinte minutos más y luego se salió, pero sin terminar aún. En ese instante Mike se dio cuenta de que su Mamá regresaba y les avisó a los demás.
El sudor perlaba la frente de Sam y les dijo a Mike y Jhon que le ayudaran a llevar a Celia al sótano; entre los tres la cargaron y la llevaron; al llegar ahí, Sam hizo a Celia hincarse y le colocó enfrente su tremenda verga, la tomó del cabello y la obligó a mamársela. Celia al principio no quiso abrir la boca, pero Sam le apretó las mejillas y la hizo abrirla.
Era impresionante ver el tremendo animalote de Sam desaparecer en la boca de Celia, la introdujo hasta el fondo, provocándole nauseas a la chica, pero tuvo que mamarlo unos diez minutos hasta que Sam quiso. Antes de sacarlo Sam le dijo a Jhon que en cuanto lo hiciera, él amordazara a Celia, pues podría gritar y Mike se había ido a distraer a su Mamá.
En cuanto Sam sacó su vergota de la boca de Celia, Jhon la amordazó con un pedazo de su blusa; luego Sam le desató las manos y la hizo hincarse viendo hacia la pared, le ató las manos a un aparato de calefacción. Después la hizo levantarse, de tal manera que ella quedó empinada; Sam se colocó detrás de Celia y con ambas manos le abrió las nalgas; Celia de inmediato adivinó lo que iba a suceder y trató de soltarse; pero no le fue posible; de repente sintió como el tremendo garrote de Sam intentaba abrirse paso en medio de las nalgas, queriendo penetrar su culo.
Sam sudaba copiosamente al no poder clavar su vergón en el apretado ano de Celia y le pidió a Jhon que le trajera vaselina; este salió por ella, pero no pudo ir porque el seguía desnudo y Mike platicaba con su Mamá en la sala y por fuerza tenia que pasar por alli.
Molesto por el incidente, Sam le dijo a Celia: â??Ni modo, por culpa de tu madre te la voy a tener que clavar así aunque te duela másâ? y volvió a intentar meterle la verga por el ano. Celia imploró, pataleó y lloró, pero de nada le sirvió; con mucho esfuerzo de Sam y mucho dolor de ella, el miembro de él empezó a abrirse paso en el ano de ella.
Celia mordió el trapo que le habían puesto tratando de soportar, pero sentía que el animalote la partía en dos, así que se quejó, pero solo ruidos inteligibles salían de su boca; Sam siguió empujando y el ano de Celia empezó a sangrar por el desgarre de sus paredes internas; Jhon le dijo a Sam que no entraría, pero este último le dijo molesto: â??¡Ya veras que si!â? y siguió empujando, haciendo que gruesas lágrimas rodaran por las mejillas de Celia.
El dolor era insoportable, Celia sentía como si un hierro candente le partía el culo; creyó que se iba a desmayar, pero el ansiado desconocimiento no llegó en su ayuda; trató también de pensar en otra cosa, desviar su atención, pero el dolor era tan fuerte que no pudo hacerlo.
El miembro de Sam sólo entró hasta la mitad, él mismo se dio cuenta que era imposible empujar más, así que decidió empezar a sacarlo; el dolor para Celia era igual que al entrar, Sam lo hizo despacio como intentando acostumbrar a Celia; pero como lo sacó en su totalidad, el ano de ella se cerró, así que al volver a meterlo, le provocó un dolor igual al primero.
Sam bombeó a Celia haciéndola sufrir lo indecible; ambos sudaban copiosamente, él por el esfuerzo y satisfacción y ella por el inmenso dolor; fueron 28 minutos de inmenso sufrimiento de la chica, hasta que Sam sintió que su orgasmo llegaba y se vino llenando de leche las entrañas de Celia.
Sam sacó su garrote del adolorido culo de Celia, pero el sufrimiento de ella no terminó, pues Jhon se había excitado al ver la tremenda cogida que le dio su amigo y se colocó en la misma posición para meterle la verga por el ano también.
Jhon empezó a meter su verga en el ano de Celia; aunque era más pequeña que la de Sam. También le provocó gran dolor a ella, pues estaba muy lastimado y la sangre que se estaba secando le provocaba ardor.
En ese momento entró Mike trayendo la ropa de sus amigos y de Celia, le dijo a Sam que se vistiera y que subiera a distraer a su Mamá, que el subiría después. Sam se vistió y se fue; Mike se desvistió y esperó a que Jhon terminara, este último no tardó mucho y le cedió su lugar a Mike.
Jhon se visitó y se salió; mientras Mike sodomizaba a su propia hermana sin esfuerzo, pues el culo de la chica ya se encontraba sumamente dilatado. Unos minutos después, Mike también llenó las entrañas de Celia de leche y sacó su verga satisfecho.
Mike desató a Celia y le ordenó vestirse, la amenazó diciéndole que no dijera nada, pues ellos negarían todo y acabaría muerta. Mike se fue y Celia se vistió llorando; su cuerpo estaba tan adolorido que tardó más en vestirse que lo normal.
Como pudo, Celia se limpió las lágrimas para que su Mamá no notara que había llorado. Al subir, vio a Mike, Jhon y Sam con cara de molestia sentados alrededor de su Madre; esta sostenía una carta y lloraba desconsoladamente, por lo que no se dio cuenta del estado de Celia. Ella se acercó y leyó la carta; en ella decía que se llamaba de nuevo a Mike a prestar sus servicios y que se requería su presencia de inmediato. Celia trató de disimular su alegría, pero no pudo evitar que se dibujara una sonrisa en su rostro. Mike lo notó y le dijo: â??no te preocupes hermanita, Jhon y Sam las cuidarán a ti y a Mamá en mi ausenciaâ?. La sonrisa de inmediato se borró de su cara.
Pero Celia no sufrió ya más, pues Jhon y Sam también fueron llamados a servicio. Tres meses después, Celia vio a su Madre llorando. Le había llegado una notificación de que Mike había muerto, pues había sido capturado por los Iraquíes, quienes lo torturaron y decapitaron. Poco tiempo después se enteraron que también Jhon había muerto en circunstancias iguales y que Sam también había sido capturado y no se tenían noticias de él. Los cuerpos llegaron poco después. Celia no supo si llorar o reír, sintió que se le había hecho justicia.