Una morena joven para mi mujer

Cada vez que podemos mi mujer, disfruta como una perra y más. Ella rubia, pasados los 40 años, viciosa, rellenita pero sin estar gorda, bisexual, amante de los intercambios de parejas, y de las mujeres.


Llamamos a una chica joven morena, primero la fotagrafié por casa, de compras, se calentó durante toda la jornada.
Al final, acabamos en casa, ellas dos gozando, una chiquita morena muy viciosa que le gustaban señoras mayores que ella. Se comían a besos, se devoraban, se chupeteaban como si fuera lo último que iban a hacer.
Y al final, con las dos, mi mujer como una perra, disfrutó, se abrió, su coño lo noté más caliente que nunca.
Yo no lo había calentado, había sido nuestra amiguita la que me la había preparado. Mi esposa me parece que gozó, más con ella que conmigo, pero bueno, qué le voy hacer, yo lo pasé bien!