Mi vecina – Relatos Eróticos

Hace ya algún tiempo, mi vecina que es una mujer de unos 57 años, me llamo para que fuera a verla, por que no le funcionaba bien un ventilador de techo.
Fui a verlo y me encontré que ella me estaba esperando vestida con un mini short y un top, los cuales no concordaban mucho con su edad, pero si con su físico, que pese a su edad, estaba bastante firme.
Yo me subí a una escalera pera ver el ventilador, y cuando reaccione ella estaba con un buen vaso de jugo de naranjas frío y mirando a mi bulto. Hacia mucho calor, y ella estaba transpirada, se notaba en su piel que estaba brillosa.
Solo tenia un cable suelto el cuál conecte sin que ella viera le dije que debía seguir buscando el problema. Esto lo hice para poder seguir viéndola un rato mas.
Desde arriba de las escaleras se podían ver bien sus pechos, yo los miraba fijamente para que ella lo notara y así poder ver su reacción.
Cuando baje de las escaleras ella me dio el baso de jugo y me llevo a la cocina para que me sentara un rato.
Ella tomo un trozo de hielo y comenzó a pasárselo por su pecho y luego lo echo en mi baso disiendome:
Se que me tenes ganas!!
Yo no sabia como reaccionar, entonces ella se me acercó y me beso llevando su mano derecha a mi verga, la cual estaba bien dura. Yo le agarre uno de sus pechos y lo comencé a acariciar, ella se saco el top y sus pechos saltaron como resortes. Entonces pude ver unos pezones rojos como fuego. Y ella me dijo “desde que murió mi marido que no me como ninguna verga”. Acto seguido se arrodillo, me desabrocho el pantalón y me comenzó a chupar la verga. Era una maestra en el arte de mamar, su lengua recorría la cabeza de mi choto, y se la mandaba a fondo asta que mi verga desaparecía completamente dentro de su boca.
Ya estaba a punto de acabar, le dije que parara, la hice ponerse de pie y recostar sobre la mesa de la cocina.
La baje el mini short, no llevaba bikini, y comencé a lamerle la concha. Para ese momento ella estaba completamente húmeda, mientras con mi dedo índice empece a dilatarle el culo.
Ella gemía como loca, sus gritos se oían en toda la casa, mi lengua entraba y salía de su concha, en un momento me tomo por la nuca y hundió mi cara en su concha asta que acabo.
Yo me incorpore y guíe mi poronga a su concha, parecía tener una aspiradora ya que literalmente la absorbió .
Allí comencé el mete y saca que la hizo estremecer, comencé a bombear frenéticamente asta el punto que ella comenzó a pedir que parar por que le estaba haciendo daño, al lo que hice caso omiso, y seguí dándole igual.
Yo estaba a mil y por fin acabe cayendo encima de ella.
Cuando me repuse mire su culo un poco dilatado, y mi verga ya repuesta lo que me llevo a metérsela en el culo sin previo aviso. Ella pego un salto, me miro y me dijo que siguiera, retome el pone y saca.
Mis huevos pegaban contra su concha chorreante de flujo que los pegoteaba.
Continúe asta que acabamos, ella abia tenido tres orgasmos.
Luego de eso, su ventilador se descomponía todas las semanas.