Mi Debut femenino Como Modelo y Servicial Mujer

Comenzaba el nuevo milenio en Chile,tenía 21 años y realizaba mi práctica laboral como junior en un taller de artes plásticas,para ser bien calificado y así graduarme como secretario administrativo.Entonces,la cincuentona y voluptuosa profesora Enilda,se fijó en mis razgos femeniles y decidió utilizarme como modelo transgénero;para sus clases de dibujo sobre la figura humana,que impartía a alumnos adultos mayores.


Como ella me prometió excelentes calificaciones por mi desempeño extra curricular,acepté sus lecciones para que me feminizara;embelleciendo mi figura y refinando mis modales.
Así debuté en una clase del retrato humano,posando semidesnudo,con un peinado,maquillaje y calzado estilo geisha.Con sensual desplante y coqueta sonrisa hacia los retratistas,me encuclillé arriba de una mesa y procedí a cubrirme con un par de abanicos los sutiles pechos;en tanto lucía con agrado,mis redondeadas nalgas y modesto pene adornado con una cinta de moño en el glande.
Cuando finalicé mi bien calificada práctica,con la satisfacción de haber logrado que los retratistas se masturbaran detrás de sus atriles,la maestra me tentó con su propuesta.A cambio de confeccionarme mi tesis de opción al título,me convertiría en su obediente y complaciente cierva;y así;al presentarme ante la cofradía de b.d.s.m. a la que pertenecía,ella ascendería a dómina.
Con curiosidad y entusiasmo por aprender a experimentar el placer con el dolor,la humillación,el castigo y el servilismo con ésta doctrina;fué que le dí mi consentimiento para que me sometiera a sus necesidades.
Tras un intenso aleccionamiento, un sábado al anochecer,mi intitutris me llevó a una antigua casona alejada de la ciudad.Allí,estaba reunido el selecto club,conformado por un mayoritario grupo de varones en bata de levantarse y con el rostro enmascarado,algunas damas con elegante lencería y antifaz;más un par de sexys sirvientas ataviadas únicamente con toca,delantal y tacones.
Luego del saludo a los jerarcas de la cofradía por parte de mi atractiva maestra;ella tañó las palmas de las manos y enseguida ingresé gateando al salón y semivestido de sensual sirvienta. Después de besarle los piés a cada uno de los cofrades,la maestra volvió a palmar las manos y al instante me incorporé y tras programar música clásica en la radio portátil;procedí a mover mi silueta con delicadeza y gracia,cual bailarina de ballett.
Equilibrándome con sensualidad sobre lasa chalas taco alto,elevaba una de mis largas y contorneadas piernas,para encorvarme y mostrarle a los presentes,mis abiertos muslos ;en cuya mitad sobresalía el fórceps que me dilataba el ano,junto con el candado que aprisionaba y recogía mis gónadas ,más el ganchito del portaligas sujeto a mi prepucio,el cual me mantenía la verga apegada al bajo vientre.
Finalicé mi danza,con las piernas estiradas paralelamente sobre el suelo y con las manos apretándome las pequeñas mamas de erectos pezones con trabas para la ropa,las cuales sobresalían por los costados del delantal.
Así y tras la aprobación con movimiento de cabeza por parte de los jerárquicos,me levanté y ofreciéndoles una reverencia me presenté:
-«Soy su cierva transexual Sexycienta y mi satisfacción es complacerlos en todo lo que me pidan.»-
En recompensa por haber colaborado a que mi intitutris la titularan con el grado de Mistress,ella me llamó a su lado y al gesticular sus labios en señal de besarme,lanzó un espezo escupitajo a mi boca,el cual tragué con agrado.Tras recibir un fustazo en las posaderas por parte de la maestra,le hice una venia y sonriente,taconeé bamboleando coquetamente el culo;y enseguida tomé una charola con copas con champaña y junto a las otras sirvientas,procedí a servirles a los presentes.
No sé,si han sido los reprimidos deseos que he tenido desde niño por lucir y actuar como una fémina,o por mi carácter sumiso que me facilitó el adiestramiento servicial;pero la realidad era de que estaba disfrutando,el que me utilizaran como su fetiche sexual.
Durante el cóctel y en mi recorrido ofreciendo los aperitivos,fuí recibiendo deliciosos mordisquitos en los lóbulos de las orejas,pellizcos en los pezones y agarrones con palmetazos en las nalgas.En agradecimiento a los cofrades por sus regaloneos,les practiqué con ganas una fellatio a los varones y un cunnilingus a las damas y en cada acabada,abría bien grande la boca y les demostraba que había ingerido hasta la útlima gota de sus respectivos fluídos.
En eso,la mistress Enilda,me dá un fustazo en el trasero y sonriente acaté su orden de ir al baño unisex para asistir a una pareja de caballeros.Allí y tras otorgarles a ambos enmascarados una reverencia,me hinqué delante de ellos y enseguida sostuve en cada mano sus correspondientes vergas,para nuevamente abrir completamente la boca y proceder a beberme sus tibios y ácido salobres chijetes de pipí.
Luego de darles las gracias por la oportunidad de saborear sus úricos elixires;saqué del bolsillo de mi delantal un espejuelo y lápiz labial para retocarme el pintado de labios y entonces los varones comenzaron a recorrer con sus inquietas manos las redondeces de mi cuerpo.
Al percibir con deleite,como esas cuatro manos se quedaron entretenidas entre mis glúteos,procedí a encorvarme,parando e lculo y separando las piernas ,para que ellos me retiraran el fórceps del recto e introdujeran sus juguetones dedos allí dentro.
Posteriormente,accedí con regocijo a sentarme en las piernas de uno de ellos,mientras su morcilla se iba internando por mi ojete ,hasta sentir como su cabezuela me cosquilleaba por dentro a la altura del ombligo.
Así ,continué placenteramente intercalando el orto por turnos con mis poseedores.En un lapso en el que me dejé llevar por sus caricias sobre mi aprisionado sexo,por cortesía de quién me enculaba en ese instante;asentí de sujetarme las piernas en alto,para que el otro gentleman me penetrara por un costado del ano con su curvo y exquisito miembro de macho.
Casi me desmayé de excitación al tener alojado,aquel par de penes de burro,que chocaban dentro de mi esfinter al embestirme.Aquel alucinante acontecimiento,hizo que les confesara extasiadamente: que si hubiera nacido hembra,sería maraca;por que siempre me ha gustado el aparato reproductor masculino.
Al acabar satisfactoriamente con mi cavidad anal inundada por sus tibias y espesas eyaculaciones,procedí a encuclillarme delante de los enmascarados y con mis carnosos labios y ansiosa lengua,les aseé sus respectivos falos;mientras evacuaba sus espermas y a la vez,descargaba dismuladamente mi efluvio seminal.
Una vez que finalicé la limpieza de las vergas,efectué con agrado el aseo del piso del baño,sorbeteando y tragando todo el charco de semen;para luego,volver a mostrarles mi abierta boca en señal de labor cumplida.
En retribución por mi ascendosa tarea,la Mistress mandó a una colega de la servidumbre,para que me aplicara una succión anal con una bomba manual al vacío.Tras aguantar la brusca expulsión intestinal fuera del recto,enseguida sentí un placentero cosquilléo y salí a gatas detrás de mi maestra,luciendo con orgullo,la colorada manzana anal que me sobresalía al bambolear el culo;y que al pasearme entre los presentes,a más de alguno le dieron ganas de comerme la fruta a mordiscos…

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