¿Qué tal amigos? Soy Luis y quiero relatar lo que me paso dos días antes de la Navidad pasada. Antes que nada les quiero decir que desde mi adolescencia hasta este momento he sentido un gran deseo por coger o manosear a mi madre, algo que no había sido posible.
Mi madre es doña Mago, una señora ya madura de 62 años de edad y todavía esta para darle unos buenos vergazos. Aún usa lencería sexy y viste como para provocar a los hombres.
Resulta que dos días antes de Navidad un sobrino y yo llegamos a visitar a mis padres, hicimos un asado y estuvimos bebiendo hasta tarde. Como les había dicho mi madre doña Mago aún es provocativa y ese día el vestido que usaba se le transparentaba su brasier y cada que se agachaba su tanga. La primera en sentirse ya muy tomada fue mi madre.
La acompañé a su recámara para que se durmiera mientras mi padre y mi sobrino seguían bebiendo. En el tramo que caminamos a su recámara me asaltaron los malos pensamiento al llevar recargada a mi madre junto a mi y como no queriendo la cosa le toque sus tetas, ella balbuceando me dijo. No hijo no hagas eso soy tu madre y debes respetarme. Yo le dije madre disculpa te estabas resbalado y no quería que te lastimaras.
La senté en su cama y le dije deja te ayudo para que te cambies y duermas a gusto, ella me respondió sal de mi recamara yo puedo sola. Entonces le dije Ok. me dejas ver tus tetas y de nuevo me dijo debes respetarme soy tu madre.
Salí de su recámara y seguí bebiendo aunque más leve con mi padre y sobrino, luego se despidieron de mí y cada uno fue a dormir. Ambos estaban hasta el copete.
Esperé un momento tomando otra copa. Me desnudé y me dirigí a la recamara de mis padres, abrí la puerta que para mi fortuna no tenía seguro.
Me hinqué del lado que duerme mi madre e introduje mis manos bajo las cobijas, ¡wow! cuando toqué a mi madre me percaté que se había puesto su negligé. Dentro de mi dije qué cachonda es mi madre.
Con cuidado puse mis manos en la parte de arriba y descubrí sus tetas, comencé a sobarlas cuando de repente mi madre aparta mis manos y dice ¡que pues! yo asustado saque mis manos de sus tetas y espere un momento. Volví a meter mis manos y acariciar y sobar sus tetas, luego empece a pellizcar sus pezones y de nuevo ¡que pues! y de nuevo asustado saque mis manos. Espere de nuevo un rato y seguí haciendo lo mismo hasta sentir como sus pezones se ponían erectos. Eso hizo que mi verga se pusiera bien erecta.
Después de estar sobre sus tetas y pezones y pasar varios sustos pase mis manos a la parte de abajo. Cabe decir que mi madre estaba volteada hacía el centro de la cama, empece a tocar sus nalgas y me percate que su tanga estaba allí. Acaricie sus nalgas que en serio estaban bien suaves, con cuidado hice a un lado la tira de tela que cubría su ojo de culo. Comencé a acariciar con un dedo este punto y cuando trate de introducirle un dedo de nuevo ¡que pues!. Paso un rato y por fin le metí el dedo en su ojo de culo y tocando sus pezones que estaban erectos supuse que estaba gozando.
Trate de tocar su panocha cuando de nuevo ¡que pues! y cambió de posición ahora estaba hacia el filo de su cama. Asustado pensando que ya me había descubierto espere un momento. Mi verga estaba bien erecta y se la acerque a la boca, se la pasé un rato por esa gran boca de mamadora de mi madre, lo se porque de tantas veces que la espié vi como se la mamaba a mi padre. De repente tomo mi verga y dijo ¡que pues! ¿que es esto? asustado quise retirarla pero mi madre no la soltó. Dentro de mi dije, ya valió. Pero no no mi madre tenia mi verga entre sus manos y bien dormida.
Libere mi verga de sus manos y procedí sobre su panocha. Hice aun lado el trianguló que cubría su panocha y cuando toque su pubis. ¡SORPRESA! estaba totalmente CALVO y suavecito. Hice a un lado esta prenda para introducir mis dedos y de nuevo tomo mi verga y ¡que pues! Carajo me asuste pero la muy puta de mi madre no me soltó, al contrario la apretó con mas ganas. Pensé esta puta quiere mi verga o va abrir los ojos y me va a joder.
Paso un rato y no pasó nada, empece sobarle el clítoris y se le puso bien erecto. Sus pezones bien parados y empezó a salir su caldo vaginal. yo dije esta puta de doña MAGO esta gozando. Comencé a introducir mis dedos en su panocha y mas jugo vaginal salia. Mi madre doña Mago estaba teniendo varios orgasmos. De repente ¡que pues! ¿qué es esto? ya no me asusté, mi madre seguía dormida y disfrutando.
Mi verga estaba al cien pero como ya amanecía ya no me atreví a coger a la caliente de doña Mago. Me retire a mi casa.
Al día siguiente regrese pensando que se hubiera dado cuenta. Pero no cuando llegue, me saludo como siempre. Disfrutamos otro día comiendo y bebiendo.
Ahora mi objetivo es ponerla borracha y gozar de todos sus agujeros, ya vi que es bien cachonda. Lo malo que DOÑA MAGO no quiere con su hijo. Pero ya se que borracha sí. Espero tener otra oportunidad. La primera ya cumplí el sueño de tocarla voy por la segunda para publicar. ME COGÍ A MI MADRE DOÑA MAGO.